Gracias al avance de la tecnología aplicada a la salud, la neuroplasticidad deja de ser una contundente inferencia médica y pasa a ser un fenómeno “visible” y palpable hasta para quienes no somos neurólogos.
Esto implica un salto cuali/cuantitativo para las profesiones que invocan resultados a modo de “comodín” para todo uso. En grafología también se suelen invocar cambios neuroplásticos indefectiblemente beneficiosos por reeducación de la escritura y por la denominada “grafoterapia”. Hoy, gracias a medios como la Resonancia Magnética Funcional, es posible visualizar los resultados.
Así ocurrió con la reeducación de la escritura en Parkinson a partir de un estudio realizado en 2018 en el Departamento de Neurología del Hospital Universitario de Colonia, Alemania y el Departamento de Ciencias de la Rehabilitación de Lovaina, Bélgica, entre otros centros de salud.
Su título indica que “El entrenamiento para la micrografía modifica la conectividad neuronal en EP” y compara los resultados de dos grupos de pacientes evaluados con una Resonancia Magnética Funcional antes y después de una práctica gráfica de seis semanas realizado sobre una tableta digital.
El grupo Experimental (13 pacientes) realizó un entrenamiento escriptográfico para agrandar la dimensión de la escritura y el grupo Placebo (14 pacientes) realizó ejercicios de relajación y yoga. En ambos casos la ejercitación fue de media hora por día durante cinco días por semana.
La intervención grafológica en el grupo Experimental, a diferencia del grupo Placebo, favoreció la conectividad en un nuevo circuito del hemisferio izquierdo.
Se llegó así a la conclusión de que el re-aprendizaje intensivo de habilidades motoras responde a una reorganización cortical, cosa que apoya la evidencia de la plasticidad cerebral inducida por el entrenamiento gráfico. En una de las imágenes se aprecian las diferencias de las áreas activadas en uno y otro grupo y, en la otra, se señala en verde la aparición de una nueva vía neuronal en el grupo Experimental que no se replicó en el grupo Placebo. Con una línea roja se marca un circuito que desapareció en el grupo Placebo en relación con el grupo Experimental. Por último, en naranja se muestra un circuito que estaba en el grupo Placebo PRE, pero ya no está en el grupo Placebo POST.
Quienes posean conocimientos suficientes de neurología para apreciar los detalles del estudio, los pueden leer en el siguiente link: Nackaerts, E., Michely, J., Heremans, E., Swinnen, S. P., Smits-Engelsman, B., Vandenberghe, W., Grefkes, C., & Nieuwboer, A. (2018). Training for Micrographia Alters Neural Connectivity in Parkinson’s Disease. Frontiers in neuroscience, 12, 3. https://doi.org/10.3389/fnins.2018.00003
Estos aportes científicos que buscan desentrañar la etiología y mecanismos de ocurrencia de la sintomatología gráfica, van en camino de afianzar estrategias de rehabilitación fundamentadas y, por lo tanto, con una lógica expectativa de eficacia.
Además, los descubrimientos, muestran que no parece tan cierta la postura por la cual se puede proponer cualquier tipo de actividad gráfica a una persona/paciente auque no sepamos su efecto real porque “de todos modos, mal no le va a hacer…” Toda una paradoja para quienes sostienen la activación neuroplástica a partir de este tipo de intervenciones. Porque, si la actividad gráfica genera nuevos circuitos (como se está demostrando), ¿no podría operar también negativamente?
Esta es la razón por la cual los grafólogos que incorporaron a las neurociencias como uno de sus saberes auxiliares preferidos, saben qué trazos modifican, por qué y qué mecanismos activan. Sobre todo son concientes de que no se pueden apoyar en el concepto de neuroplasticidad como una panacea que solo genera efectos positivos.
Mientras reflexionamos sobre estos temas, en el Hospital de Clínicas de Buenos Aires, desde el año pasado los Grafólogos (además de Concursar por el cargo) tenemos que presentar seguro de Mala Praxis para poder trabajar…
Para seguir pensando…
Corina Lage dice
Adriana, son sumamente interesantes todos estos avances en grafología y neurociencias.
Mi duda es la siguiente. ¿De qué manera un ejercicio escritural puede producir un cambio negativo en un paciente con EP?
¿Un circuito neuronal puede dejar de funcionar o desaparecer?
No termino de entender si ocurre y cómo.
Muchas gracias
Cariños
Corina
Adriana Ziliotto dice
Hola Corina! Es verdad que, por suerte, se avanza mucho en este terreno. Respondo a tus preguntas a partir de lo que he leído y experimentado. Si la reeducación (en Parkinson) se debe basar en el fortalecimiento del circuito de la escritura voluntaria pero yo propongo ejercitación para activar el circuito automático, podría hacer que el circuito voluntario se debilite o atrofie y eso implicaría un cambio negativo para el paciente, que escribiría cada vez con mayores deficiencias. Esto lleva implícita la respuesta a la segunda pregunta. Cuestiones como estas las prodrías dilucidar a fondo buscando papers al respecto (en la Biblioteca Biomédica de USA). Y los temas de tu interés que no fueron abordados todavía, los podés plantear en ámbitos científicos como nuevas hipótesis de investigación. Lo bueno es que todo se puede investigar. Cariños!!
Susan de Ostos dice
Buenas noches, ¿me podría orientar con respecto a la caligrafía de mi hijo? Él tiene 13 años recién cumplidos u su letra es francamente espantosa, desde bebé hizo ejercicios conforme a su edad y crecimiento, gateo, a los 7 meses, camino al año, lo ponía a pintar con pintura dactilar, hacer bolitas de papel y demás actividades para desarrollar su motricidad fina, nunca a podido mejorar la letra. ¿Esto tendrá qué ver con algo más? Agradezco enormemente su respuesta 🙏🏽
Adriana Ziliotto dice
Hola Susan! No puedo opinar sin ver los escritos… pero, por lo que comentás, parece que se descartan los problemas médicos, cosa que es muy importante, lo primero que se debe hacer. Luego, habría que tener un diagnóstico psicopedagógico, ya que consignás un problema de aprendizaje del gesto gráfico, una responsabilidad de la escuela. Habría que ver qué hizo la escuela al respecto. A partir de cómo ha sido esa intervención, quizá correspondería la consulta a un Grafólogo especializado en reeducación de la escritura. A su edad, la rehabilitación ya no sería con cuadernillos de caligrafía. Deberías guiarte por los consejos de la escuela…Te deseo mucha suerte y seguimos comunicadas! Un abrazo!